Sri Chaitanya-bhagavata. Adi-kanda. Capítulo siete.

Sri Chaitanya-bhagavata. Adi-kanda. Capítulo siete.

śrī-caitanya-bhāgavata grantha śuddha-bhakti-mata
kahe sadāśrī-bhaktivinoda
nirantara pāṭha-phale kubuddhi yāibe ca’le
kṛṣṇa-preme labhibe pramoda

Śrī Bhaktivinoda siempre sostuvo que el Śrī Caitanya-bhāgavata describe el proceso del servicio devocional puro. Por estudiar constantemente este libro, la mentalidad pecaminosa es destruida para dar cabida al júbilo del amor extático por Krishna.

Srila Bhaktisiddhanta Sarasvati

***

Todas las glorias a Sri Guru y Sri Gauranga

 Sri Chaitanya-bhagavata

de Srila Vrindavan Das Thakur

 

Sri Sri Guru Gaura Nityananda (Ekachakra Dham)

Adi-kanda
Capítulo  siete

El sannyas de Sri Visvarup

 

¡Todas las glorias, todas las glorias al Señor Gaurachandra, quien es el Señor Supremo de todos los Señores! ¡Todas las glorias, todas las glorias a Sri Visvambhar y a Sus muy queridos devotos!

¡Todas las glorias al ilustre hijo de Sri Jagannath Misra y Sachimata, quien es la vida y el alma de todos los devotos entregados! Oh, Señor Visvambhar, por favor, misericordiosamente míranos y libéranos a todos.

Usando el pretexto de Pasatiempos infantiles y alegres, en Nabadwip Dham el Señor Gaurasundar expandió Sus formas ilimitadas y espirituales y Su trascendental servicio devocional.

El travieso Nimai incansablemente les hacía travesuras a todos. Aunque Su madre trataba de corregirlo con dulces consejos, Él no prestaba la más leve atención.

En la presencia de una buena instrucción, El hacía el doble de travesuras. Todo aquello en la casa con lo que tenía contacto, lo destruía con regocijo.

Por aprensión, los padres finalmente se abstuvieron de darle alguna otra instrucción. El incontenible Nimai jugaba a Su capricho, manifestando Sus maravillosos Pasatiempos. Las descripciones de Nimai en el Adi-khanda son como néctar para los oídos. Aquí son descritos los maravillosos Pasatiempos del Señor Supremo, Sri Narayan.

El Señor no le temía a nadie; ni a Su padre ni a Su madre. Sin embargo, en la presencia de Su hermano mayor, Visvarup, Él era suave y humilde.

Sri Visvarup, el Señor Supremo, es el depósito de todas las cualidades divinas y un renunciante desde Su mismo nacimiento.

Visvarup explicaba que la esencia de todas las Escrituras es el sendero del servicio devocional al Señor Supremo. Nunca nadie tuvo el poder para refutar Sus explicaciones.

Él estaba absorto en el Señor Krishna y, por ocupar Su oír, Su habla, mente y todos los otros sentidos en el servicio al Señor, Él se tornó más y más desinteresado en cualquier otra cosa.

Cuando contemplaba la insólita conducta de Nimai, Visvarup se llenaba de asombro.

«Este niñito no es una personalidad mundana ordinaria. Su hermosa forma y extraordinario comportamiento me hace pensar que Él es el Señor Bala-Gopal.

»Le he visto llevar a cabo continuas actividades sobrehumanas, y Yo creo que realmente Él es el Señor Supremo, Sri Krisna, que ejecuta esos Pasatiempos en el cuerpo de este niño».

El magnánimo Visvarup reflexionaba acerca de este asunto por algún tiempo, pero no le revelaba Su realización a nadie, y prefería permanecer concentrado en Su propio servicio.

A Visvarup se le encontraba siempre en la asociación de devotos Vaisnavas puros, hablando de temas acerca de Krishna, ocupado en el servicio a Krishna y adorando al Señor con devoción.

La gente del mundo siempre ha andado loca tras la vida mundana, la riqueza, los hijos, la educación, etc. Cuando la gente materialista de Nadia veía a los devotos Vaisnavas, quienes por naturaleza están disgustados con la vida material, los ridiculizaban.

Los materialistas componían versos y los recitaban cuandoquiera que veían a un Vaisnava. «Los sannyasis renunciantes, las damas castas y los yoguis que ejecutan austeridades, todos tienen que morir. Entonces, ¿para qué su inútil esfuerzo?

»Para nuestro estándar, una persona afortunada tiene los medios para cabalgar un caballo o ser llevada sobre un palanquín con diez o veinte personas corriendo frente y por detrás.

»Ustedes están empapados con lágrimas de emociones espirituales mientras le cantan a su Señor, pero no vemos ninguna seña de que su pobreza y miserias sean aliviadas.

»Su Señor seguramente se enojará si continúan gritando: “¡Hari! ¡Hari!”, ¡tan fuertemente y tan seguido!»

Los devotos puros del Señor sentían pena por las personas ateas, quienes, desprovistos de devoción, hablaban de una manera tan ofensiva.

En todas las direcciones, los devotos vieron a la gente ardiendo en el fuego de la existencia material. En ninguna parte podían escuchar el kirtan de los Nombres del Señor Hari.

Sri Visvarup, en particular, sentía mucha angustia a causa de la ausencia del kirtan del Nombre de Su amado Krishna Chandra.

Si alguna vez se tenían pláticas acerca del Bhagavad-gita y del Srimad Bhagavatam, el orador nunca explicaba los privilegios de servir con devoción al Señor Krishna, lo cual es la verdadera esencia de esas Escrituras.

Los instructores se destruían ellos mismos por pervertir el significado de las Escrituras y especular sobre las conclusiones. El servicio devocional le es desconocido a semejante sociedad materialista.

Sri Advaita Acharya Prabhu y los otros devotos Vaisnavas vivían colmados de piedad y lamentación por la desafortunadas entidades vivientes quienes viven afligidos por desvirtuadas concepciones de la vida.

Sri Visvarup estaba deprimido por el ambiente y se dijo a Sí Mismo: «No me gusta ver las caras pecaminosas de la gente de esta sociedad materialista. Iré a vivir al bosque».

Cada día al amanecer, después de bañarse en el Ganga, Sri Visvarup visitaría la casa de Sri Advaita Acharya Prabhu.

Sri Acharya Prabhu acostumbraba gritar con satisfacción cuando escuchaba a Sri Visvarup explicar que la esencia de todas las Escrituras es el proceso del servicio devocional al Señor Krishna.

Él abandonaría Su adoración regular solo para escuchar las pláticas de Sri Visvarup. Los Vaisnavas reunidos exclamarían: «¡Hari! ¡Hari!», en aprecio a la plática.

Los devotos rugirían como leones en el éxtasis de la Conciencia de Krishna y sentirían desaparecer de sus corazones la carga pesada de la desesperanza.

En esos días, nadie deseaba abandonar la asociación de Visvarup, ni Él tampoco podía separarse de los devotos.

Un día, cuando Sachimata había terminado de cocinar, ella le dijo a Sri Visvambhar que trajera a casa a Su hermano mayor para que comiera.

Llevando esa instrucción, el Señor Visvambhar corrió hacia la residencia de Sri Advaita Acharya para traer a Su hermano.

En la casa de Acharya, Él vio la asamblea de Vaisnavas que discutía acerca de los muy propicios temas del Krishna-lila.

Sri Gauransundar, quien es Krishna Mismo, se sintió satisfecho de escuchar que los devotos lo glorificaban, y los cautivó con Sus miradas.

Cada línea de la forma trascendental del Señor parecía desafiar los límites de la belleza exquisita; el brillo de millones y millones de lunas pierde su lustre cuando se compara con la refulgencia de incluso una de las uñas de los dedos del Señor.

Con el pecho desnudo y cubierto de polvo, Visvambhar sonrió y llamó a Su hermano mayor.

«Hermano, ven a comer. Madre te llama». Él se prendió del dhoti de Visvarupa y juntos caminaron hacia el hogar.

La encantadora belleza de Visvhambhar había dejado en un trance a los devotos. Ellos lo contemplaron con asombro, incapaces de moverse.

Los devotos se sumergieron en una meditación y experimentaron el éxtasis del Krisna-prema. Incluso sus pláticas sobre el Krishna-lila no pudieron continuar.

La persona materialista es incapaz de comprender las actividades trascendentales del Señor de atraer y cautivar el corazón de los devotos.

Este misterio es revelado en el Srimad Bhagavatam donde el mensaje incomparable de Sukadev Goswami le es revelado a Maharaj Pariksit.

En un milenio previo, Sri Gaurasundar apareció en Gokul, como Krishna. Él andaba por los diferentes hogares en compañía de Sus amigos, llevando a cabo Sus Pasatiempos infantiles.

Las damas pastoras de vacas de Gokul tenían más afecto por el bebé Krishna que por sus propios hijos.

Aunque las Gopis no entendían que el Señor Krishna era el Señor Supremo, ellas naturalmente sentían más afecto por Él que por sus propios hijos.

El rey Pariksit quedó asombrado por las inequívocas respuestas de Sukadev Goswami a sus preguntas y escuchó con absorto éxtasis.

«Oh, Sukadev Goswami, lo que me has expresado nunca había sido revelado en todo el universo. Ciertamente, es el tema más extraordinario.

»Tan solo ve cómo ellas amaban a Krishna, el hijo de otra mujer, más que a sus propios hijos».

Srila Sukadeva Goswami contestó: «Oh, rey Pariksit, la Suprema Personalidad de Dios es percibida como la Superalma que mora en el corazón, junto con cada entidad viviente. Él es el muy amado Señor del corazón.

»Cuando el alma abandona el cuerpo del hijo, la esposa, el amigo o el pariente, los miembros de la familia llevan el cuerpo fuera de la casa, en apenas un momento.

«Por lo tanto, es la Superalma quien constituye la vida de cada entidad viviente. Esa Superalma no es otro que Sri Nanda Nandana, Krishna.

»Con las características inherentes de la Superalma, el Señor Krishna puede atraer el afecto de las Gopis.

»Este hecho es aplicable solo a los devotos, pues aquel que no es un devoto jamás puede sentir afecto por el Señor.

»Con todo, el Señor Krishna también residió dentro del corazón de Kamsa y otros demonios, así que, ¿porqué ellos sentían envidia y enemistad hacia Él? La razón es que esos demonios habían cometido penosas ofensas en sus vidas previas.

»Todos están de acuerdo en que la dulzura del azúcar es fácilmente perceptible; solo una persona enferma sentirá amargo su sabor. Es la lengua la que está enferma, no es el defecto del azúcar. La Suprema Personalidad de Dios, el Señor Chaitanya, es el más dulce de todos».

Todos veían al Señor en Nabadwip, pero nadie aparte de los devotos lo reconocieron.

Dondequiera que caminaba en Nabadwip, Nimai cautivaba el corazón de los devotos mientras realizaba Sus maravillosos Pasatiempos.

El día en que Visvambhar fue para llamar a Su hermano, Él encantó los corazones de los Vaisnavas.

El magnánimo Advaita Mahasaya pensó: «Ciertamente que este niñito no es una personalidad ordinaria mundana.

»No puedo enteramente determinar la naturaleza interna de este niño», dijo Advaita a los devotos reunidos.

Simultáneamente, los devotos glorificaron Su extraordinaria belleza.

Sri Visvarup regresó pronto a casa y luego regresó de nuevo directamente a la casa de Sri Advaita Acharya.

Los disfrutes de la vida material no eran atractivos para Sri Visvarup. Él solo sentía alegría cuando cantaba las glorias del Señor Krishna.

En Su propia casa, Sri Visvarup pasaba Su tiempo en el Visnu-grha, un cuarto separado para la Salagrama-shila. Él se identificaba poco con las formas del trato familiar.

Sus padres estaban muy ansiosos por que se casara, y cuando Él escuchó sus planes, Él se volvió taciturno.

Él se consumía en un solo pensamiento: «Abandonaré Mi familia e iré al bosque».

Solo el Señor Supremo puede conocer Sus propias inclinaciones internas, de modo que Sri Visvarup, el Señor Supremo, tras unos pocos días aceptó la orden de renuncia de sannyas en ese tiempo.

Con el nombre de Sri Sankararanya, el cual se tornó famoso por todo el universo, este principal entre los Vaisnavas, partió de viaje en el sendero eterno.

La partida de Sri Visvarup produjo intenso dolor en el corazón de Sachimata y Sri Misra.

Los padres, junto con los miembros y amigos de la familia, gimieron con lamentación. Sri Visvambhar no pudo soportar el verse separado de Su hermano y cayó inconsciente.

Soy incapaz de describir la esencia del intenso dolor y lamentación que afligió al hogar de Sri Misra.

Sri Advaita Acharya Prabhu y todos los demás devotos derramaron profusas lágrimas debido al insoportable sentimiento de encontrarse separados de Sri Visvarup.

Personas de todas las clases de la sociedad de Nadia quedaron conmovidas por la pena cuando escucharon las noticias del sannyas del muchacho.

Sachimata y Sri Misra, con el corazón roto por la aflicción, gritaban: «¡Visvarup! ¡Visvarup! ¡Visvarup!»

Sri Jagannath se sintió abrumado por los punzantes dolores de encontrarse separado de su hijo, y sus amigos y parientes trataron de consolarlo.

«Querido Misra, por favor, cálmate. No te sientas triste, esta magnánima personalidad ha traído la liberación a toda la familia.

»Si algún miembro de la familia acepta la orden de sannyas de la vida, entonces, innumerables generaciones se vuelven elegibles para vivir en la morada trascendental de Vaikuntha.

»El curso de acción que adoptó tu hijo constituye ciertamente la perfección de toda educación.

»Debemos expresar nuestra enorme felicidad por ustedes», les dijeron mientras tocaban los pies y las manos de los afligidos padres.

«Ahora, piensen en Visvambhar. Él es la gloria de tu familia. Este hijo tuyo será el renuevo de toda la línea familiar.

»Él eliminará todos los sufrimientos de ustedes. ¿Qué necesidad hay de innumerables millones de hijos cuando ustedes tienen uno como este?»

Los amigos y parientes trataron de hacer que Misra entendiera su posición afortunada. Ellos ofrecieron buenos consejos, sin embargo, fracasaron en mitigar la miseria de él.

Misra Mahasaya trató de controlar su emoción, pero tan pronto como recordó las maravillosas cualidades de Sri Visvarup, se perdió en el dolor.

«Nunca sabré con seguridad si este hijo se quedará o no conmigo», dijo Sri Misra.

»El Señor Supremo, Krishna, me dio este niño y Él Mismo puede tomarlo de nuevo. Lo que el Señor Krisna desee ciertamente deberá ocurrir.

»Las entidades vivientes infinitesimales no poseen sino un insignificante poder sobre los fenómenos de la vida. Por lo tanto, mi cuerpo, sentidos y todo, te los entrego a Ti, Señor Krishna, el Omnipotente Señor Supremo. Tú eres mi único refugio».

Ejerciendo verdadera sabiduría y estando establecido en el conocimiento de lo absoluto, Misra Mahasaya gradualmente calmó su perturbada mente.

De este modo, Sri Visvarup llevó a cabo el Pasatiempo de abandonar Su casa y aceptar sannyas. Él es la directa expansión no diferente del Señor Nityananda, el original Sankarsan.

Quienquiera que escucha el Pasatiempo de cómo Sri Visvarup aceptó la orden de vida de sannyas, se libera de la soga del karma y alcanza el servicio devocional al Señor Krishna.

Los devotos experimentaron sentimientos mezclados acerca del sannyas de Sri Visvarup. Quedaron capturados entre el regocijo y el abatimiento.

«El Señor Krishna nos ha quitado la única asociación Vaisnava santa que tuvimos.

»Con Sri Visvarup discutimos temas de la Conciencia de Krishna, pero ahora se ha ido.

»Nosotros también deberíamos abandonarlo todo e irnos al bosque donde ya no tengamos que ver las caras de esta sociedad pecaminosa.

»Toda la población está absorta en actividades depravadas. ¿Cuánto se supone que tendremos que tolerar los insultos que nos infligen las viles palabras de los ateos?

»En ningún lado es pronunciado el Santo Nombre del Señor Krishna. Todo el mundo está invitando su ruina, ahogándose en las ilusorias actividades de la complacencia de los sentidos.

»Si a los ateos se les explica el claro proceso del servicio devocional al Señor Krishna, ellos lo rechazan y nos ridiculizan.

»“¿Qué felicidad han obtenido por adorar a Krishna?”, preguntan ellos. “Viven en una condición empobrecida, mendigan incluso su comida y su miseria simplemente crece continuamente”».

Los devotos emitían hondos suspiros y reconocían que ya no eran capaces de vivir en esa degradada sociedad. Ellos deseaban irse al bosque.

Advaita Mahasaya consolaba a cada uno de los devotos, y decía: «Ustedes en verdad van a conocer la dicha más elevada.

»Siento un gran alborozo en Mi corazón como si el Señor Krishna Chandra hubiera hecho Su divina Aparición.

»Vayan y canten felizmente el Santo Nombre del Señor Krishna. En unos cuantos días ustedes verán aquí mismo a nuestro amado Señor Krishna.

»El Señor Krishna llevará a cabo muchos Pasatiempos placenteros, asistido por todos ustedes.

»Solo entonces Yo, Advaita, seré conocido como un servidor impoluto del Señor Krishna.

»Esa extraordinaria misericordia que incluso muy difícilmente a veces la experimentan Srila Sukadev Goswami y Prahlad Maharaj, la recibirán todos ustedes».

Inspirados por las nectáreas palabras de Srila Advaita Acharya Prabhu, los devotos cantaron jubilosamente el nombre de Hari.

Mientras los devotos repetían con gritos el nombre del Señor Hari, su corazón se llenaba de felicidad.

El Señor Gaurasundar estaba ocupado jugando con Sus amigos, cuando llegó hasta Su casa el sonido del Nombre del Señor Hari. Él inmediatamente salió hacia la casa de Advaita.

Cuando llegó en medio de los devotos, ellos le preguntaron: «¿Qué te trae por aquí, querido niño?» Nimai contestó: «¿Por qué Me llamaron?»

Con Su grupo de jóvenes amigos, Nimai arrancó en una carrera. Nadie pudo comprender la verdadera identidad del Señor Visvambhar debido a la influencia de Su potencia trascendental ilusoria.

Desde el día que Sri Visvarup abandonó la casa para volverse un sannyasi, Visvambhar redujo al mínimo Su alborotada y traviesa conducta.

Nimai se quedó al lado de Su madre y padre para mitigar su dolor, causado por verse separados de Visvarup.

Él se contuvo de jugar y, mientras estudiaba, no dejaba Sus libros por un momento.

Después de estudiar un aforismo por una vez, Nimai lo llegaba a dominar tan bien que cuando se le preguntaba acerca de eso, Él lo enriquecía mejor que nadie.

Viendo la extraordinaria inteligencia de Nimai, las personas alababan a Sus padres, diciendo: «Sri Misra y Sachimata están realmente bendecidos».

Ellos le dijeron a Sri Misra: «Querido Misra, en verdad eres muy exitoso al tener un hijo tan ilustre.

»No hay otro niño en todos los tres mundos que iguale la sabiduría superior de Nimai. Incluso Él excederá en erudición a Brihaspati.

»Él puede presentar sus propias espontáneas explicaciones sobre cualquier asunto y nadie es capaz de derrotar Sus engañosos argumentos».

Sachimata se sentía tan feliz de escuchar acerca de los maravillosos atributos de su hijo, pero Sri Misra se puso melancólico nuevamente.

«Este hijo tuyo nunca se involucrará en la vida de casado», le dijo Sri Misra a Sachimata.

»Visvarup estudiaba las Escrituras tal como ahora lo hace Nimai. Él entendió que no hay chispa de realidad en la existencia material.

»Conociendo la esencia de las Escrituras, nuestro sabio Visvarup rechazó la efímera vida material y se fue al bosque.

»Si Nimai también conoce de las Escrituras, ciertamente seguirá el mismo sendero.

»Nimai es todo lo que nos queda, Él es nuestra vida misma. Si lo perdemos, ciertamente abandonaremos nuestros cuerpos.

»Por lo tanto, Él ya no debe estudiar. Él puede ser un niño iletrado y que se quede en la casa.

Sachimata arguyó: «¿Cómo se mantendrá si permanece como un iletrado? Es más, nadie entregará su hija para que se case con un analfabeta».

Sin embargo, Sri Misra contestó: «Seguramente tú eres la ingenua hija de un bráhmana. Deberías saber que el Señor Krishna, quien es el protector de todos, ha creado todo. Él dará y tomará todo lo que es requerido.

»Toda la creación material es mantenida por el Señor del universo, Krishna. ¿Quién te ha mal informado que el simple conocimiento materialista puede ayudar a mantener algo?

»El Señor Krishna tiene el completo control de todo; incluso Él idea la pareja del novio y la novia. Ambos, el novio erudito así como también el novio iletrado, obtienen una novia.

»El Señor Krishna es omnipotente y mantiene a todos. Lo que tú ves como linaje, educación formal, etc., es simplemente una apariencia de la realidad.

»¿Por qué no me tomas como un ejemplo, que se encuentra aquí justo enfrente de ti? Aunque poseo suficiente erudición, soy pobre de todas maneras.

Hay personas que ni siquiera pueden pronunciar apropiadamente el alfabeto, con todo, ve por ti misma a los miles de eruditos que se amontonan a sus puertas.

»Así pues, no es la educación formal u otra cualificación material lo que nos mantiene, más bien, es el Señor Krishna quien conserva y mantiene a todos.

»Si uno nunca ha adorado los pies de loto del Señor Govinda, ¿cómo será posible que viva una confortable opulencia y encuentre la muerte en un estado dichoso? Por ofrecer servicio devocional al Señor Krishna, sufrimos las congojas de la pobreza, pero abrazamos la muerte en un estado feliz. Este no es el caso para aquel que depende de su conocimiento y riqueza materiales.

»Una persona puede poseer suficiente erudición, nacimiento elevado y opulencia, sin embargo, el Señor Krishna le puede adjudicar una enfermedad incurable, que le produce mucha miseria.

»Esa persona no puede realmente deleitarse en el placer sensual. Él arde de frustración, y yo diría que se siente más miserable que un pordiosero indigente.

»Toma en cuenta esto: Toda opulencia no es nada. Incluso aunque uno posea una gran riqueza, su futuro está determinado completamente por el deseo del Señor Krishna.

»No te molestes pensando en la manutención de tu hijo. Puedo asegurarte que el Señor Krishna lo cuidará.

»Mientras haya vida en mi cuerpo, Nimai no sentirá el más leve tinte de sufrimiento.

»Todos tenemos como nuestro único refugio al Señor Krishna. Además, ¿por qué deberías preocuparte cuando eres una buena madre y una esposa casta y dedicada?

»Te pido que fijes en ti la idea de que no es necesario que Nimai estudie. Que mi hijo permanezca en la casa como un analfabeta».

Habiendo hecho su decisión, Sri Misra llamó a su hijo y le anunció: «Nimai, te prometo que, desde hoy, estás libre de todo estudio. Puedes hacer lo que gustes.

»Lo que desees, hijo mío, estoy listo para dártelo. Solo quédate en casa y permanece completamente satisfecho».

Sri Misra salió para atender otros asuntos, y el Señor Supremo Sri Visvambhar pudo entender que Sus estudios se hallaban interrumpidos.

Como la fuente de los principios religiosos eternos, Sri Gauranga, fue obediente a la instrucción de Su padre y no asistió a la escuela.

Sin embargo, el Señor se sintió desanimado y una vez más emprendió Su humor travieso e impetuoso junto con los otros niñitos de Su edad.

Tanto en Su propia casa como en las de los vecinos, Nimai destruía y derrochaba todo lo que encontraba al alcance.

Incluso hasta el anochecer, Nimai permanecía lejos de casa. Toda la tarde, Él llevaba a cabo diversos Pasatiempos junto con los otros niños.

Cubriéndose con una manta, de manera que lucieran como un toro, Nimai y otro amigo iban arriba abajo de una manera divertida.

Durante el día, ellos habían visto un plantío de plátano en un pequeño traspatio, y en la noche, vestidos en su traje de toro, ellos saqueaban los árboles de plátano.

El propietario de la casa daba un fuerte grito cuando veía al toro en su jardín, pero para el momento en que un gentío se había levantado para remediar la situación, ya Nimai y Sus amigos se habían escapado.

A veces, ellos cerraban por afuera las puertas de los vecinos, para evitar que ellos salieran de la casa a usar el retrete que estaba fuera. Cuando la gente dentro de la casa hacía un alboroto, Nimai y sus amigos arrancarían a correr.

Día y noche, el Señor de Vaikuntha y Sus amigos, hacían incontables travesuras.

No había límite a las actividades traviesas del Señor Visvambhar, con todo, Sri Misra nunca lo reprendía.

Un día, Sri Misra fue llamado a atender algún deber y Nimai empezó a sentirse enojado debido a que no se le permitía estudiar.

En Su casa, las ollas usadas para cocinar las ofrendas al Señor Visnu eran desechadas y apiladas afuera. Nimai decidió sentarse encima de las ollas contaminadas.

Sentándose encima de la pila de ollas contaminadas como si fueran un trono real, Sri Gaurasundar miraba a los alrededores expresando en Sus labios una sonrisa.

El tizne negro de las ollas contaminadas puso manchas en su tez dorada. Él lucía como un muñeco dorado untado con sándalo oscuro de dulce aroma y pasta aguru.

Algunas amistades se dirigieron a Sachimata y le informaron: «Nimai está sentado encima de las ollas contaminadas».

Sachimata se sintió consternada cuando lo vio: «Mi querido niño, ese no es un lugar apropiado para sentarse», le dijo, regañándolo.

»¿Después de todos estos años no puedes distinguir entre las cosas limpias y las sucias?

»¿No sabes que uno tiene que bañarse después de tocar ollas sucias?»

El Señor Nimai replicó: «Ustedes no me permiten estudiar, ¿cómo esperan que conozca la diferencia entre lo limpio y lo sucio? Solo soy un bráhmana iletrado.

»Soy un tonto sin educación, sin ninguna idea de qué es limpio y qué es sucio. Veo una unidad en todo; mi visión no conoce dualidad».

Después de esta plática, Nimai sonrió desde lo alto de Su asiento de ollas sucias. En ese momento, Él manifestó el humor del Señor Dattatreya, la encarnación de Krishna como el hijo de Atri.

Su madré replicó: «Ahora que te has sentado en un lugar impuro, ¿cómo te  purificarás?»

Sin embargo, el Señor Visvambhar contestó: «Madre, tienes una mentalidad extremadamente infantil. Yo nunca estoy situado en un lugar contaminado.

»Dondequiera que estoy, ese lugar se vuelve muy santificado. Allí residen Ganga Devi y otros lugares de peregrinaje.

»Lo limpio y lo no limpio son imaginarios. Esa es una forma condicionada de pensar. ¿Qué falla hay en el Creador o Su creación?

»Supóngamos que algo está contaminado conforme a la etiqueta social o a las opiniones ritualísticas védicas. Entonces, si Yo, la Pureza Suprema Absoluta, lo toco, entonces, ¿qué contaminación puede haber ahí?

»En realidad, estas ollas no están contaminadas en lo más mínimo, debido a que tú cocinaste en ellas para el Señor Visnu.

»Los utensilios para cocinar al Señor Visnu nunca pueden estar contaminados. Al contrario, ellos pueden purificar todo y cada lugar simplemente por su contacto».

Después de hablar la verdad absoluta no-dual tal como un niño habla de temas ordinarios, Nimai sonrió. Por la influencia de Su potencia ilusoria, nadie pudo penetrar en Sus palabras.

Sin embargo, todos ellos sonrieron condescendientemente a la plática del pequeño Nimai, mientras que Sachimata insistió en que fuera a bañarse. No obstante, Nimai no dejaba las ollas, de modo que Sachimata lo persuadió: «Ven rápido antes de que Tu padre llegue a casa y se entere de todo esto».

Aun así, Nimai fue inflexible: «Si ustedes no Me permiten estudiar, entonces no me moveré de este lugar. Se los estoy diciendo claramente».

Los vecinos voltearon a ver a la madre de Nimai y le preguntaron: «¿Por qué le prohíben a Nimai continuar con Su educación?

»Muchas personas instruyen a sus hijos con incansable preocupación. Cuán afortunados son ustedes que este niñito quiera estudiar por Su propio acuerdo.

»¿Cuáles de sus enemigos les han aconsejado que mantengan en casa a su hijo como un tonto analfabeta?

»A Nimai no se le debe culpar en lo más mínimo por esta situación».        Dirigiéndose a Nimai, ellos dijeron: «Sí, niño, si a partir de hoy no se te permite estudiar, entonces ciertamente debes continuar Tu tarea destructiva».

Sentado en lo alto de las ollas, Nimai sonrió dulcemente y las almas afortunadas que lo vieron, flotaron en un océano de absoluta dicha.

Eventualmente, Sachimata misma tuvo que bajar al niño. Todo ese rato, el Señor Gaurachandra, luciendo como un hermoso zafiro azul, continuaba sonriendo dulcemente.

Nimai explicó la verdad absoluta no-dual en el humor de Su encarnación previa, el Señor Dattatreya, pero nadie pudo entender su significado debido a la influencia de la potencia ilusoria del Señor Visnu.

La piadosa Sachimata le contó toda la historia a Sri Misra y se quejó: «Nuestro hijo está triste porque no se le permite estudiar».

Algunos vecinos le preguntaron al padre de Nimai: «Querido Misra, sabemos que eres un alma de mente elevada. ¿Bajo el consejo de quién le prohibes a tu hijo que continúe Su educación?

»Cualquier cosa que el Señor Krishna desee, siempre se hará realidad; por lo tanto, disipa tus preocupaciones y permítele a tu hijo que estudie sin ansiedad.

Ciertamente eres afortunado de que tu hijo, por Su propia voluntad, desee aprender. Así que, escoge un día propicio, inicia a tu hijo con el cordón sagrado de bráhmana y comienza de nuevo Sus estudios, apropiadamente».

Sri Misra contestó: «Todos ustedes son mis muy queridos amigos. Lo que ustedes decidan, debo aceptarlo».

Las actividades del joven Nimai son todas sobrehumanas y aunque todos las miraban con sumo asombro, nunca pudieron entender su profundo misterio.

Ocasionalmente, personas piadosas y afortunadas fueron a visitar a Sri Misra y le informaron acerca de las cualidades sobrehumanas de su hijo.

«A este niño nunca se le debe considerar un muchacho ordinario», le aconsejaron. «Manténlo cerca de tu corazón con la mayor atención».

El Supremo Actor de Vaikuntha, Nimai, retozaba traviesamente en Su propio patio.

Luego, con el permiso de Su padre, Sri Chaitanya alegremente reanudó Sus estudios.

Sri Krishna Chaitanya y Sri Nityananda Chandra son mi vida y alma. Yo, Vrindavan Das, humildemente ofrezco este canto a Sus pies de loto.

Traducción al español

Sri Chaitanya Saraswati Sridhar Govinda Sevashram de México, A. R. (Jai Balai Das)

CAPÍTULO 6

CAPÍTULO 8

Comments

comments