Sri Chaitanya-bhagavata. Adi-kanda. Capítulo nueve.

Sri Chaitanya-bhagavata. Adi-kanda. Capítulo nueve.

śrī-caitanya-bhāgavata grantha śuddha-bhakti-mata

El Śrī Caitanya-bhāgavata describe el proceso del servicio devocional puro.

kahe sadāśrī-bhaktivinoda

Así lo afirma siempre Srila Bhaktivinoda

nirantara pāṭha-phale kubuddhi yāibe ca’le

Por estudiar constantemente este libro, la mentalidad pecaminosa es destruida.

kṛṣṇa-preme labhibe pramoda

Para dar cabida al júbilo del amor extático por Krishna

Srila Bhaktisiddhanta Sarasvati

***

Todas las glorias a Sri Guru y Sri Gauranga

 Sri Chaitanya-bhagavata

de Srila Vrindavan Das Thakur

Sri Sri Guru Gaura Nityananda (Ekachakra Dham)

Adi-kanda
Capítulo  nueve

La niñez y los peregrinajes de Sri Nityananda

¡Todas las glorias a Sri Krishna Chaitanya, el ilimitado océano de la misericordia! ¡Todas las glorias al Señor Nityananda, el más querido amigo del afligido!

¡Todas las glorias al Señor Chaitanya, el tesoro de la vida y alma de Sri Advaita Acharya, y el invaluable tesoro de Sri Gadadhar Pandit! ¡Todas las glorias al Señor Visvambhar, el hijo de Sri Jagannath Misra y Sachimata! ¡Todas las glorias a todos los devotos quienes son los queridos asociados del Señor!

El Señor Ananta Sesa aparece en el distrito de Radhadesh, bajo la orden previamente expresada de Sri Chaitanya. Él permaneció en el mundo material conforme al deseo trascendental de Mahaprabhu.

Sri Nityananda Prabhu, el Señor de los Vaisnavas Gaudiyas aparece en la aldea de Ekachakra. Su padre es un bráhmana llamado Hadai Pandit y Su madre es Srimati Padmavati Devi.

Desde su temprana niñez, Sri Nityananda Prabhu tiene un ánimo sereno y es extremamente inteligente. Él es un manantial de excelencias. Su encantadora belleza eclipsa el atractivo de millones y millones de Cupidos.

Desde el momento del nacimiento de Nityananda, todo se tornó propicio en Radhadesh. La hambruna, la pobreza y toda clase de perturbaciones fueron disipadas.

El día de la Aparición del Señor Chaitanya en Nabadwip, Sri Nityananda, quien se encontraba todavía en Radhadesh, gritó con júbilo.

El sonido de esa exclamación rugiente llenó el universo y capturó cada uno de sus sentidos.

Algunas personas especularon: «Debe ser un trueno». Otros pensaron que era el sonido de un inminente desastre. No obstante, otros dijeron: «Conocemos la razón de ese sonido. El Señor Nityananda, el Señor los Vaisnavas Gaudiyas, está gritando con un rugido de éxtasis».

Las personas ofrecieron diferentes opiniones sobre el asunto, pero en realidad, nadie conocía verdaderamente al Señor Nityananda, a causa de Su potencia ilusoria.

El Señor Nityananda ocultó Su identidad y jugó alegremente con los otros pequeños de Su edad.

Los diversos juegos que el Señor Nityananda practicaba con Sus amiguitos eran en realidad manifestaciones de los diferentes Pasatiempos del Señor Krishna.

Una vez, los niños se reunieron y formaron un consejo divino en el que alguno tomó el papel de la Madre Tierra, e hicieron una petición.

Muchos otros acompañaron a esos niños mientras iban a la ribera del Océano de Leche y ofrecían oraciones selectas al Señor Krisna.

Un cierto muchacho invisible a los demás, gritó con una fuerte voz: «Apareceré en Gokul, Mathura».

En algunas tardes, el Señor Nityananda reunía a Sus pequeños amigos y representaba el casamiento de Sri Vasudev con Devaki Devi.

Cerrando todas las puertas y ventanas del cuarto para crear un calabozo, el Señor Nityananda representaba el nacimiento del Señor Krishna, el cual ocurrió en lo profundo de la noche mientras el resto del mundo dormía.

Luego, llevaron al bebé, el Señor Krishna, a su imaginario Gokula Dham y lo intercambiaron por la bebita, Mahamaya, la potencia externa del Señor. Así, engañaron al malvado rey Kamsa.

Luego, Nityananda vistió a un jovencito como Putana e hizo que alguien subiera al regazo de ella para mamar de su pecho.

Un día, ayudado por algunos amigos construyó un sakata, una carreta de mano, con unos carrizos duros y luego lo destruyó al darle una patada.

A veces, sin que fuera visto por alguien, entraba en las casas de los lecheros de la vecindad cercana y robaba mantequilla con Sus jóvenes amigos.

Los muchachos nunca querían abandonar la compañía de Sri Nityananda ni regresar a casa. Día y noche, disfrutaban de Pasatiempos en Su trascendental asociación.

Los padres de estos jovencitos nunca amonestaron al pequeño Nityananda, sino que afectuosamente todos lo ponían en su regazo.

Todos quedaban asombrados: «Nunca vimos actividades tan maravillosas. ¿Cómo un simple niño conoce tantos Pasatiempos trascendentales de Krishna?»

Un día, Él hizo con hojas una serpiente tal como Kaliya. Él llevó a todos los muchachos para que se sumergieran en el agua.

Cuando los muchachos saltaron al agua y jugaron a que caían inconscientes, Nityananda los revivió.

Un día, fue al bosque de Talavan con Sus jóvenes amigos. Después de matar al demoníaco asno Dhenukasura, disfrutó de los frutos tala con todos Sus compañeros.

Nitai llevaría junto con Él a Sus jóvenes amigos cuando iba a pastorear las vacas y entonces representarían los Pasatiempos del Señor Krishna cuando mataba a esos demonios.

Tocando Su cuerno de búfalo todo el camino, Nitai regresaría alegremente a casa, al atardecer, junto con las vacas y Sus muchos jóvenes amigos.

Un día, todos ellos representaron el Pasatiempo del levantamiento de la Colina de Govardhan. Otro, hicieron una recreación de Vrindavan Dham y jugaron mientras se absorbían en recordar los muchos lugares y Pasatiempos de Sri Krishna.

Otro día, ellos representaron el Pasatiempo de robar las ropas de las gopis de Vraja, y en otro, fueron con las yajña-patnis, las esposas de los bráhmanas, quienes estaban ocupados en realizar sacrificios.

Un día, un niño se vistió enteramente como Narada Muni, con traje y barba, y le dio un consejo secreto a Kamsa mientras estaban sentados en un lugar apartado.

En otra ocasión, un jovencito, vestido como Akrura, representó el lila de llevarse a Krishna y a Balaram de Vrindavan a Mathura, bajo la orden del cruel rey Kamsa.

Haciendo el papel de una gopi de Vraja, Nityananda lloró amargamente en un humor de intensa separación. Sus lágrimas fluyeron como el torrencial de un río y todos los niños lo miraron con asombro.

Por la influencia de la potencia Visnu-maya, nadie podía entender la verdad acerca de Sri Nityananda. Inconscientes de Su identidad suprema, los jovencitos jugaban gozosamente con Él.

En su juego, después de que ellos hicieron una recreación de Mathura, Sri Nityananda caminó por la ciudad, junto con Sus amigos. Alguien se vistió como un jardinero y adornó a los muchachos con guirnaldas de flores.

Nitai vistió a alguien como Kubja, la mujer jorobada de Mathura, y luego llevó a cabo el Pasatiempo de ir a su casa para que le fuera untada una fragante pasta de sándalo. Luego, Él hizo un arco, lo ató con una cuerda y después fácilmente lo rompió (tal como Sri Krishna lo había hecho, para gran temor de Kamsa), en medio de la alegre bulla de Sus queridos amigos.

Actuando como Sri Krishna, Sri Nityananda pretendió matar al elefante enloquecido, Kuvalayapida, y a los dos luchadores, Chanura y Mustika, en la arena de Kamsa. Luego, Él buscó al pequeño amigo que se había vestido como Kamsa, lo arrastró por el cabello y se montó sobre él.

Después de la pretendida muerte del cruel rey Kamsa, Nitai bailó con júbilo junto con sus jóvenes amigos y todos los que estaban viendo la obra empezaron a reírse muy alegremente, con aprecio.

En esta primorosa forma, el Señor Nityananda y Sus pequeños amigos imitaron los muchos diferentes Pasatiempos trascendentales de las diversas Encarnaciones de las Divinidades Supremas, Sri Krishna y Sri Balaram.

Un día, el Señor Nityananda se convirtió en el Señor Vamana, e hizo que alguien más hiciera el papel de Bali Maharaj. Él representó el Pasatiempo del Señor Vamana cuando engaña a Bali Maharaj para quitarle su vasto reino, el cual se extendía por los tres mundos.

Alguien actuando como Sukracharya apareció en el disfraz de un anciano y le prohibió a Bali Maharaj escuchar al Señor Vamana y Su petición de tres pasos de tierra. Sin embargo, el Rey Bali satisfizo la petición del Señor Vamana y de ese modo el Rey Bali fue bendecido al recibir sobre su cabeza los pies de loto del Señor.

Un día, el Señor Nityananda se convirtió en el Señor Ramachandra y construyó un puente por encima del océano, hacia Lanka. Todos los jovencitos se vistieron como monos y formaron un ejército de monos para el Señor.

Gritando: «¡Jai Raghunath!», ellos hicieron caer unos árboles de aceite de ricino y los arrojaron al agua, de ese modo, tendieron un puente.

En otra ocasión, el Señor Nityananda hizo el papel de Laksman. Agarrando Su arco, salió impetuosamente para buscar a Sugriva.

«Oh, tú, miserable mono. Mi Señor se encuentra afligido. Si te importa tu vida, ven de inmediato. Sri Ramachandra nos espera ansiosamente en la Montaña Malyavan y tú estás aquí disfrutando en medio de mujeres».

Otro día, Él reprendió a Sri Parasuramana con creciente furia: «No se me debe culpar por esto, oh, bráhmana. Ahora, ¡huye inmediatamente!»

Sri Nityananda era extremadamente adicto a aceptar el papel de Sri Laksman y se absorbía en ello, pero los jovencitos pensaban que todo era para divertirse. Eran incapaces de entender su recóndito significado.

En otra ocasión, los jovencitos se vistieron como los famosos cinco monos: Sugriva, Hanuman, Nala, Nila y Tara, y el Señor, como Laksman, les preguntó:         «¿Quiénes son ustedes? Veo que todos pertenecen a la raza de los monos, ¿por qué vagan por el bosque? Soy el sirviente de Raghunath, el Señor Ramachandra, por favor, preséntense».

Ellos contestaron: «Estamos vagando en el bosque por temor a Vali. Por favor, llévanos ante Sri Ramachandra de manera que podamos recibir el polvo de Sus pies de loto».

Después de abrazar a cada uno, Laksman los trajo ante el Señor Ramachandra, y todos ellos cayeron a los pies de loto del Señor, ofreciéndole postradas reverencias.

Un día, el Señor Nityananda representó el Pasatiempo de la muerte de Indrajit, y otro día se ensimismó en las emociones de Sri Laksman.

Después de vestir a un niño como Vibhisan, Nitai lo trajo ante el Señor Ramachandra y el Señor lo designó como el Rey de Lanka.

Un muchacho se acercó a Nitai, y dijo: «Yo soy Ravana, el Rey demonio. Arrojaré sobre Ti mi muy poderosa arma sakti-shila. Evítala, si puedes, Laksman».

Desafiando a Laksman con estas palabras, el muchacho arrojó una flor de loto a Nitai. Concentrado en el humor de lucha de Laksman, Nitai se fue de espaldas, cayendo al piso, inconsciente.

A pesar de los esfuerzos de los muchachos por despertarlo, Nitai yacía allí, sin el más leve movimiento.

El Señor yacía sin señal de conciencia en todo Su cuerpo, mientras, Sus amigos temiendo lo peor, se sentaron alrededor agarrando sus cabezas con aprensivo lamento.

La madre y el padre de Nitai fueron de prisa al lugar, y cuando ellos vieron sin vida el cuerpo de su hijo, ambos se desmayaron y cayeron al piso. Quienquiera que vio la situación quedó ciertamente consternado.

Los jovencitos describieron los detalles al anonadado gentío que se había juntado, y alguien habló, diciendo: «Creo entender la razón de la pérdida de conciencia de Nitai.

»Hace tiempo, un gran actor representó expertamente el papel del Rey Dasaratha quien sufrió tan tremendamente y quien eventualmente murió cuando su hijo, Sri Rama, fue desterrado. En la representación, cuando el actor escuchó que Sri Rama había sido desterrado al bosque, él también abandonó su cuerpo al instante».

Escuchando esto, otra persona sugirió: «Aquí está un muchacho vestido como Hanuman; si él le da un remedio a Nitai, Nitai estará bien de nuevo».

Antes de la representación, el Señor Nityananda le había instruido a todos Sus jóvenes amigos: «Si caigo inconsciente, entonces deben rodearme y llorar.

»Después de esperar por un momento, envíen a Hanuman por un remedio. Cuando regrese y acerque el remedio a Mi nariz, recobraré la vida».

El Señor había caído inconsciente por simplemente experimentar Su humor interno como Laksman. Naturalmente, esto había confundido a Sus ignorantes jóvenes amigos.

Los muchachos estaban conmocionados a causa del aparente estado de muerte de Nitai y ahora habían olvidado esas previas instrucciones de Nityananda. Ellos simplemente repetían: «¡Levántate, querido hermano! ¡Levántate, querido hermano!», y lloraban con fuertes voces.

Cuando los muchachos escucharon la sugerencia de esa persona, repentinamente recordaron la instrucción del Señor. El muchacho vestido como Hanuman corrió velozmente para conseguir las hierbas medicinales.

Otro jovencito, vestido como un asceta, pero quien realmente era el demoníaco tío materno de Ravana, encontró a Sri Hanuman en su camino y lo invitó a compartir con él algunas frutas y comida.

«Por favor, quédate aquí, querido Hanuman, y bendice mi humilde ermita. Me siento enormemente afortunado de poder encontrar a una personalidad como tu buena persona».

«Mi misión es urgente y delicada», contestó Hanuman. «Debo apurarme, no me puedo quedar. Debes haber escuchado que Laksman, el joven hermano del Señor Rama, yace en un estado de coma, golpeado por la poderosa arma sakti-shila de Ravana. De modo que debo correr hasta la Colina Gandhamadana para conseguir la medicina que salvará Su vida».

El asceta insistió: «Si tienes que irte, entonces, al menos toma un baño, y después de comer algo puedes continuar tu victorioso viaje».

Mediante la potencia del Señor Nityananda, Sus jóvenes amigos representaron sus papeles individuales de una manera tan elocuente que todo el gentío miraba fascinado de asombro.

Incitado por el asceta, Hanuman se dirigió al gran lago para bañarse. Un jovencito vestido como un gran cocodrilo atrapó el pie de Hanuman y lo arrastró hacia lo profundo del agua. No obstante, el poderoso Hanuman jaló el cocodrilo hasta la ribera del lago.

Hanuman enfrentó una breve pelea con el cocodrilo y tras derrotarlo, el gran Hanuman, quien es conocido como Mahavira, se dirigió hacia su destino.

Sin embargo, otro jovencito, vestido como un demonio rakshasa, atrapó a Hanuman con el intento de comérselo.

«Has matado al cocodrilo, pero ¿cómo te propones a matar alguien tan poderoso como yo? Te voy a devorar. Así que, ¿quién salvará la vida de Laksman?», rugió el rakshasa.

Sri Hanuman replicó: «Tu Ravana es un perro. Yo lo desprecio. Sería mejor que ahora huyeras lejos».

Por un rato, ellos se lanzaron insultos el uno al otro de este modo y luego agarrándose de los cabellos, empezaron una fiera lucha con los puños.

Pronto, Sri Hanuman destrozó al demonio rakshasa y continuó hacia la Colina Gandhamadana, donde entró en lo profundo del bosque.

En el bosque, algunos jovencitos vestidos como Gandharvas se abalanzaron en una decidida pelea y Sri Hanuman se vio obligado a pelear con ellos.

Después de derrotarlos, Hanuman, al fallar en localizar la especial hierba, levantó y llevó sobre su cabeza, para Laksman, toda la Colina Gandhamadana.

Otro jovencito, vestido como un médico, buscó en la Colina y encontró la hierba, la preparó y colocó la medicina bajo la nariz de Sri Laksman, mientras meditaba en Sri Ramachandra.

El Señor Nityananda, la Suprema Personalidad de Dios, recobró entonces la conciencia y se levantó, para gran alivio de Sus padres y de todos los presentes.

Sri Hadai Pandit corrió hacia Nitai y lo puso cariñosamente en su regazo. Los jóvenes amigos sintieron que su corazón se aligeraba y se llenaron de júbilo.

Todos quedaron impresionados por la representación y preguntaron: «Querido muchacho, ¿dónde aprendiste a representar todos estos Pasatiempos?»

Nitai sonrió y contestó: «Todos estos son Mis pasatiempos trascendentales».

En Sus primeros años, Sri Nityananda es un niño extremadamente bello y atractivo. Llenos de deleite al tocarlo, nadie dejaba de mimarlo en su regazo.

La gente de Radhadesh lo amaba más que a sus propios hijos. Con todo, nadie podía reconocerlo como el Señor Supremo a causa de la influencia de la potencia Visnu-maya.

De esta manera, Sri Nityananda jugaba durante Su niñez. Su única fuente de felicidad era representar los maravillosos Pasatiempos de Sri Krishna.

En la mañana, todos los jóvenes amigos de Sri Nityananda salían de prisa de sus hogares para disfrutar todo el día de Su nectárea compañía.

Ofrezco mis innumerables reverencias a los pies de todos esos jóvenes asociados del Señor Nityananda, quienes disfrutan de incontables y encantadores Pasatiempos con Él.

Así, desde Su misma niñez, la única inclinación de Sri Nityananda es volver a vivir las trascendentales actividades de Sri Krishna.

¿Quién puede describir los sobrehumanos e ilimitados Pasatiempos de Sri Ananta Sesa, Sri Nityananda? Solo mediante Su misericordia puede manifestarse la percepción correcta de esos Pasatiempos dentro de nuestro corazón.

El Señor Nityananda vivió en casa por doce años, continuamente llevando a cabo esos Pasatiempos. Después, salió de peregrinaje.

Él viajó a los diferentes lugares de peregrinaje por doce años. Luego, finalmente, Él fue a encontrar la asociación de Sri Chaitanya, en Nabadwip.

Por favor, escuchen esta narración de los viajes de Sri Nityananda a los diversos lugares de peregrinaje en esta sección Adi-khanda del libro.            Quienquiera que critique de alguna manera al Señor y Sus actividades, es ciertamente un ateo bribón y pecaminoso.

Esta Suprema Personalidad, Sri Nityananda, Quien liberó al universo entero, es con certeza el ilimitado océano de la misericordia.

Solo por Su gracia somos capaces de comprender la naturaleza trascendental de Sri Chaitanya. En verdad, solo por medio de la gracia de Sri Nityananda se manifiestan las glorias divinas de Sri Chaitanya.

Escuchen muy atentamente esta descripción de los peregrinajes del asociado más amado de Sri Chaitanya, Sri Nityananda.

En Su viaje, el primer lugar sagrado que visitó el Señor Nityananda fue el templo de Vrakesvar. Luego, anduvo por los bosques de Vaidyanath, completamente solo.

Después de visitar Gaya-dham, Nityananda fue a Kasi, el principal lugar de peregrinación para los Shivaístas, que está situado en las riberas del Ganga cuando el Río fluye hacia el norte.

El beber sus aguas y bañarse en ellas llenó de alborozo al Señor Nityananda, pero, por alguna razón una ansiedad trascendental se aferraba a Él.

En Prayag, el Señor se bañó en la confluencia de los tres ríos sagrados en las tempranas horas de una mañana helada del mes de Magha. Luego, procedió hacia Mathura donde Él había aparecido en el Yuga previo. En Mathura, visitó el lugar de Nacimiento del Señor Krishna.

Atraído por el río Yamuna, el Señor jugó en sus mansas aguas en el lugar de baño llamado Visrama-ghat. Luego, circunvaló la Colina de Govardhan y experimentó un gran éxtasis espiritual.

Uno por uno, empezando con Sri Vrindavan, el Señor visitó los doce bosques de Vraja y a Su voluntad vagó alegremente bajo sus sombras.

En Gokul, el Señor vio la residencia de Maharaj Nanda. Colmado por el éxtasis, se sentó y lloró profusamente.

Luego, el Señor ofreció adoración a la Deidad del Señor Madana-Gopal y de allí fue hacia Hastinapur, la famosa ciudad fortaleza de los valientes Pandavas.

Allí, el Señor derramó lágrimas de felicidad, intensamente conmovido por el santificado sitio de esos excelsos devotos del Señor Supremo. Sin embargo, los residentes de ese lugar no pudieron entender esas emociones a causa de su falta de sentimientos devocionales.

La visita a Hastinapur, trajo recuerdos de las actividades del Señor Balaram, y el Señor Nityananda exclamó: «¡Sálvame, oh, Señor Haladhar!» De este modo, adoró el lugar sagrado.

Después, Sri Nityananda viajó hacia la sagrada ciudad de Dvaraka y se bañó en el océano, sintiendo gran dicha espiritual.

A continuación, fue a Siddhapur. Ese lugar se volvió sagrado por la presencia del Señor Kapila. Tras eso, Nityananda fue a Matsya-tirtha donde ofreció granos en caridad durante un gran festival.

El Señor visitó Shiva-kanchi y el vecino Visnu-kanchi. Siendo la original Persona Suprema, Sri Mula-Sankarsan Visnu, Sri Nityananda se divirtió con el conflicto que existía entre los fanáticos seguidores del Señor Shiva y el Señor Visnu.

Viajó por Kurukshetra, Prithudaka, Bindu-sarovara, Prabhasa y Sudarsana-tirtha.

Luego, Sri Nityananda fue a Tritakupa, Vishala, Brahma-tirtha y Chakra-tirtha.

Con ánimo jubiloso, Nityananda viajó entonces al sagrado lugar, Pratisrota, donde el Prachi-Sarasvati fluye hacia el Occidente antes de desembocar en el océano. De allí, fue a visitar el bosque de Naimisaranya.

Luego, el Señor Nityananda viajó hacia la ciudad de Ayodhya. Al ver el lugar de nacimiento del Señor Ramachandra, Sri Nityananda se conmovió y derramó profusas lágrimas de amor divino en el éxtasis espiritual.

Luego, viajó hacia el reino tribal del Rey Guhaka-chandala, Sringa Verapura. El Rey Guhaka-chandala había reinado durante la época del Señor Ramachandra y en ese lugar sagrado Sri Nityananda cayó en el más profundo trance extático.

Por recordar las actividades de Su devoto querido, el rey tribal, Guhaka-chandala, Sri Nityananda perdió la conciencia externa durante tres días.

Posteriormente, Sri Nityananda visitó los diversos bosques a través de los cuales alguna vez anduvo el Señor Supremo, Sri Ramachandra. Sri Nityananda en angustia rodó por el suelo, a causa de los sentimientos en profunda separación de Su amado Señor.

Luego, el Señor se bañó en los sagrados ríos Sarayu y Kausiki, cuando ellos fluyen tranquilamente en Ayodhya. Después, continuó hacia el ashram de Pulatsya Rishi, un sitio muy santificado.

A continuación, Sri Nityananda se bañó en las aguas de los Ríos Gomati, Gandaki y Shona. Él trepó la montaña Mahendra donde ofreció Sus reverencias al Señor Parasuram. Desde allí, viajó hacia Haridvar, la fuente de la Madre Ganga.

Luego, visitó y se bañó en los Ríos Pampa, Bhimarathi, Godavari y Venva.          Luego, en el Río Vipasa, el cual es conocido también como el Río Vyasa, permaneció sumergido en el agua por un tiempo.

En Madurai, visitó el templo de Kartikeya y luego fue a la montaña conocida como Sri-saila Parvata. Allí, en un inmenso e impresionante templo, Sus devotos, el Señor Shiva y Parvati, son opulentamente adorados como una pareja de bráhmanas.

El Señor Shiva y Parvati reconocieron a Sri Nityananda como su adorable Señor Supremo. Ellos entendieron que el original Sankarsan había aparecido ante ellos como un peregrino en las ropas de un mendicante.

De ese modo, Shiva y Parvati recibieron con regocijo a sus excelso huésped y lo atendieron con el más grande afecto. Parvati cocinó deliciosos platillos para la satisfacción de Sri Nityananda y en reciprocidad, Sri Nityananda les ofreció Sus reverencias a Shiva y Parvati.

Solo el Señor Krishna conoce los temas confidenciales que fueron abordados en las subsecuentes charlas entre estas súper excelentes personalidades. Después, el Señor Nityananda fue a la provincia Dravida en el Sur de la India.

Él viajó por los diferentes lugares de peregrinaje, tocando lugares como Vyenkatanatha, Kamakoshthi Puri y Kanchi, llegando finalmente al sagrado Río Kaveri.

Luego, procedió hacia el famoso lugar de peregrinaje de Sri Rangam, donde el misericordioso Señor Sri Ranganath recibe una adoración opulenta de Sus devotos. Luego, el Señor Nityananda visitó Hari-kshetra.

Después, visitó la Montaña Rishabha, Madurai, y los Ríos Kritamala, Tamraparni y Uttara Yamuna.

En las Colinas de Malaya, llegó al ashram del Rishi Agastya. Todos los residentes quedaron espiritualmente cautivados de recibir como huésped a una personalidad divina como Él.

Llegando a Badarikashram con ilimitada dicha espiritual, se absorbió en su atmósfera divina y pasó unos días en la tranquila soledad del ashram de los Rishis Nara-Narayan.

Desde allí, hizo un viaje difícil hasta la ermita de Srila Vyasadev, quien inmediatamente reconoció a Sri Nityananda como su adorable Señor Balaram.

Srila Vyasadev sirvió a su huésped con mucha atención y Sri Nityananda reciprocó y ofreció Sus reverencias a Srila Vyasadev.

Continuando con Sus viajes, el Señor Nityananda se encontró con un lugar donde cierto número de Budistas estaban sentados. Les hizo unas cuantas preguntas, pero ninguno de los monjes contestó. Esto encendió la ira de Sri Nityananda y corrigió su mala conducta por patear a cada uno en la cabeza. Sonriendo impotentemente, los Budistas se dispersaron, corriendo aquí y allá, y el Señor continuó Su viaje, paseando intrépidamente a través del bosque.

Sri Nityananda viajó al sur hacia Kanya-kumari y vio la hermosa Deidad de Durga Devi instalada cerca de la playa del Océano Índico, en la punta extrema sur de la India.

También visitó Sri Anantapura y el Pañchapsara-kunda. En Gokarna, visitó los templos del Señor Shiva. En Kerala y Trigarta, fue de casa en casa derramando Su misericordia sin causa sobre todos.

Luego, visitó a la diosa Parvati, quien permanece cerca de Gokarna, en la isla de un río.

Luego, Sri Nityananda vio los Ríos Nirvindhya, Payoshni y Tapti, los cuales fuyen hacia el sur de las Colina Vindhya, y anduvo por ese trecho de tierras.

Luego, Sri Nityananda visitó la ciudad de Mahismati Puri en la ribera del Río Reva y vio Malla-tirtha. Después, Sri Nityananda se dirigió hacia el Occidente y visitó el distrito de Surparaka en Su camino.

El Señor Nityananda viajó por toda la región con un humor feliz, intrépido y despreocupado. Él se encontraba continuamente sumergido en el amor extático por Sri Krishna. Colmado de éxtasis, a veces lloraba y a veces reía. ¿Quién puede entender la bienaventurada turbulencia que se movía en Su corazón?

Durante el periodo de Su viaje mientras recorría las provincias occidentales, por una disposición divina, Se encontró con Madhavendra Puri.

Sri Madhavendra Puri es la personificación del extático amor trascendental por

Sri Krishna, y todos Sus discípulos que son como cisnes están llenos del mismo amor espiritual. Su único medio de subsistencia es el néctar que fluye de sus intercambios amorosos con Sri Krishna. El Señor Krishna personalmente reside en la forma de esos inmaculados devotos tales como Sri Madhavendra Puri.

Sri Advaita Acharya Prabhu es el primero entre los discípulos de Sri Madhavendra Puri. En el entendimiento de mi carencia de palabras adecuadas, ¿cómo puede empezar a describir el intenso amor de Sri Madhavendra Puri por Sri Krishna?

Cuando Sri Nityananda Prabhu encontró a Sri Madhavendra Puri, quedó anonadado, perdió la conciencia y cayó al suelo dominado por el extático amor trascendental. Madhavendra Puri también se sumergió en un trance extático y perdió toda conciencia externa al ver a Sri Nityananda.

Sri Gauranga señalaba a menudo que Sri Madhavendra Puri es el tronco principal del árbol de las nectáreas melosidades devocionales.

Isvara Puri y otros discípulos afortunados de Madhavendra Puri atestiguaron el excepcional encuentro. Las lágrimas fluyeron ininterrumpidamente de sus ojos cuando vieron a las dos formas yaciendo en el suelo en un trance devocional.

Cuando recobraron sus conciencias y de nuevo fueron conscientes de la presencia del otro, Madhavendra Puri y Sri Nityananda se abrazaron mientras lloraban con lágrimas de júbilo.

Ellos rodaron por la arena y gritaron fuertemente, sin ningún reparo por expresar sus sublimes emociones, totalmente absortos en el éxtasis del Krishna-prema.

Sus profusas e incontrolables lágrimas purificaron a la Madre Tierra, quien sintió que estaba recibiendo su máxima bendición.

En sus cuerpos se manifestaron en incontables olas los diversos síntomas extáticos de temblor, llanto y erizamiento del vello. La presencia de tales emociones devocionales confirma que Sri Chaitanya personalmente reside en ambos.

El Señor Nityananda habló primero: «Hoy, en un instante, recibí el supremo beneficio de todos Mis peregrinajes. Mis ojos han reposado en los pies de loto de Sri Madhavendra Puri y al ver su trascendental amor por Krishna, Mi vida fue bendecida y se llenó de significado».

Sri Madhavendra Puri se sentó enmudecido, estrechando al Señor Nityananda contra su pecho, con su voz ahogada por las emociones extáticas. Su sentimiento de amor por Nityananda fue tal que no podía liberarlo de su abrazo.

Isvara Puri, Brahmananda Puri y todos los demás discípulos de Madhavendra Puri pudieron percibir espiritualmente lo que acababa de suceder, de manera que eso incrementó su atracción y apego natural por el Señor Nityananda.

En el pasado, habían visto a muchos peregrinos con indumentaria santa, pero ahora ellos entendían que ninguno de esos peregrinos poseía realmente el trascendental regalo del amor a Krishna.

Al asociarse y conversar con personas sin devoción, el remordimiento frecuentemente los dominaba. De manera que ellos habían resuelto vagar por el bosque buscando con atención a Krishna y a Sus amorosos devotos puros. Ahora habían encontrado al más puro de los trascendentalistas y en su compañía experimentaron internamente alivio de la carga de su desesperanza y manifestarse el Krisnaprema.

Nityananda y Madhavendra Puri pasaron juntos unos días dichosos que estuvieron repletos de pláticas confidenciales acerca de la Conciencia de Krisna. Esto produjo una insaciable sed en el Señor y Madhavendra Puri de asociarse continuamente.

El profundo y espontáneo amor que Sri Madhavendra Puri poseía lo llevaba a un trance extático con solo ver una nube oscura de lluvia que le recordara el matiz de Sri Krishna.

Día y noche permanecía embriagado de amor por Krishna, a veces riendo, y al siguiente momento, llorando, y a veces haciendo una gran bulla, gritando: «¡Hai! ¡Hai!»

El Señor Nityananda también se embriagaría con el divino néctar de amor por el Señor Govinda. Él se tropezaba, cimbraba y repetidamente caía, a menudo gritando con risas.

Los discípulos de Madhavendra Puri tenían respeto por el extraordinario y profundo amor que su Maestro Espiritual y el Señor Nityananda tenían por el Señor Supremo, y ellos respondían por cantar continuamente el nombre de Sri Hari.

Sumergidos en la ambrosía del amor trascendental, Sri Nityananda y Madhavendra Puri perdían la cuenta del tiempo. No sabían cuando el día se transformaba en noche o la noche en día, e ignoraban lo que pasaba a sus alrededores.

¿Quién puede entender los elevados temas confidenciales que discutían Sri Madhavendra Puri y el Señor Nityananda? Solo el Señor Krishna, la omnisciente Superalma, lo sabe todo.

Sri Puri acrecentó tan rápido su afecto por el Señor Nityananda que no podía imaginarse que tuviera que abandonar Su compañía: pasaba cada momento de su tiempo con Él.

Sri Madhavendra Puri dijo: «En ningún lado encuentro la presencia de ese ilimitado amor trascendental como en el Señor Nityananda. Dondequiera que exista ese amor, ese se vuelve mi favorito lugar sagrado de peregrinaje.

»Ahora estoy convencido de que el bendito Señor, Sri Krishna, tiene una misericordiosa disposición hacia mí, pues he hallado un asociado íntimo como el Señor Nityananda.

»Dondequiera que sea que uno encuentre al Señor Nityananda, ese lugar se convierte en el lugar más sagrado. Los planetas trascendentales de Vaikuntha descienden y están presentes allí.

»Quienquiera que sea asocie con el Señor Nityananda y escuche acerca de él, seguramente alcanza el servicio devocional más puro a los pies de loto de Sri Krishna.

»Y quienquiera que albergue siquiera una pizca de apatía hacia el Señor Nityananda es echado por el Señor Krishna, aunque tenga las vestiduras de un devoto».

Sin vacilación, Sri Madhavendra Puri expresó su profundo afecto por el Señor Nityananda con sus propias palabras y hechos.

Simultáneamente, el Señor Nityananda desarrolló un profundo afecto y un humor reverencial hacia Sri Puri, y lo consideró Su Guru.

Floreció una maravillosa relación en la que cada uno continuamente alegró al otro con su extático amor por Sri Krishna, y los días y las noches pasaron desapercibidos para Ellos.

De ese modo, disfrutaron por varios días, con regocijo, la asociación trascendental del uno con el otro. Luego, el Señor Nityananda se fue hacia el Sur, a Setubandha, Ramesvaram, donde el Señor Ramachandra hizo construir un puente hacia Lanka con la ayuda de Su ejército de monos.

Sri Madhavendra Puri partió hacia el Río Sarayu. Inmerso en un estado de completa dicha de amor por Sri Krishna, Ellos se separaron, despreocupados incluso de sus propios cuerpos.

Las vidas de esos impolutos devotos de Krishna se sostienen solo a causa de su intenso amor hacia el Señor. De otro modo, ¿cómo podrían continuar viviendo y tolerar las congojas extremadamente dolorosas de encontrarse separados de su amado Señor?

Esas almas fieles que escuchan esta narración del extraordinario encuentro entre Sri Madhavendra Puri y el Señor Nityananda, seguramente alcanzarán la perfección máxima, el amor por Krishna.

El Señor Nityananda viajó sumergido en la ambrosía del amor por Krishna y finalmente, en unos cuantos días, llegó a Setubhandha.

Se bañó en Dhanus-tirtha y procedió a ver a Sri Rameshvar. Luego, viajó hacia Vijayanagara.

Después, visitó Mayapuri, Avanti y el Río Godavari, y de allí, fue hacia el templo del Señor Jiyada-Nrisimhadev.

En este entonces, el Señor decidió ir a Jagannath Puri y en camino, visitó Tirumala y Kurma-kshetra.

El Señor vio la bandera del templo del Señor Jagannath, ondulando en lo alto, justo cuando entraba a Purushottama-kshetra, Puri, y de inmediato cayó al piso en un trance de éxtasis.

En ese sagrado Dham, Sri Nityananda vio al Señor Jagannath, el Señor de Dvaraka, la fuente del chatur-vyuha: Sankarsan, Vasudev, Aniruddh y Pradyumn — presente con todos Sus divinos asociados y devotos.

Esas visiones despertaron el humor extático de Sri Nityananda, y Él cayó inconsciente al piso. Cuando recobró la conciencia, los diversos síntomas extáticos de temblor, palidecimiento, llanto, erizamiento de los vellos y fuertes gritos, se manifestaron, y nuevamente cayó al suelo.

¿Quién puede percibir la profundidad del extraordinario Krishnaprema que existe en el corazón de Sri Nityananda?

Sri Nityananda permaneció unos cuantos días en Nilachala y luego, inmerso en una total dicha espiritual, viajó hacia el norte, a Ganga-sagara.

¿Cómo es posible describir el peregrinaje de Sri Nityananda? Solo por Su gracia se hace posible mi débil intento.

Contagiado por el fervor de Su peregrinaje, el Señor viajó de nuevo a Mathura y Vrindavan.

Completamente absorto en pensamientos acerca de Sri Krishna, Sri Nityananda no tuvo conciencia del pasar de los muchos días y noches que permaneció en Vrindavan.

Se olvidó de comer y solo ocasionalmente bebió un poco de leche si le llegaba sin pedirlo.

Sri Nityananda pudo visualizar que Su Señor, Sri Chaitanya, vivía como un muchacho ordinario en Nabadwip y pensó para Sí Mismo:

«Cuando el Señor Gaurachandra revele Sus magnánimos Pasatiempos del canto congregacional del Santo Nombre del Señor, en ese entonces iré a Nabadwip y Me dedicaré a servirle».

De esa manera, resolvió esperar en Vrindavan y no procedió hacia Nabadwip, sino hasta más tarde.

Él pasaba Sus días retozando felizmente en las oscuras aguas refrescantes del Kalindi, entregado en el humor de un joven pastorcillo de vacas. En ocasiones, Él disfrutaba mucho jugando en la arena junto con Sus jóvenes amigos, los muchachos locales de Vrindavan.

El Señor Nityananda es el original Señor Visnu y posee la total absoluta potencia para agraciar a cualquiera con Krishnaprema. Con todo, Él se contuvo y esperó pacientemente que pudiera recibir y luego ejecutar la orden de Sri Chaitanya para distribuir profusamente, a todos y sin discriminación, ese muy preciado tesoro, el amor a Sri Krishna.

Los asociados del Señor Chaitanya no desean actuar sin las instrucciones del Señor para guiarlos, ni se sienten ofendidos por aceptar esa posición humilde.

El Señor Ananta, el Señor Brahma y el Señor Shiva todos llevan a cabo Sus respectivos deberes bajo las órdenes del Señor Chaitanya y así mantienen, crean y destruyen este mundo.

Desafortunadamente, los pecaminosos ateos se siente infelices porque no pueden aceptar este punto. Esas personas no son dignas de ser vistas por los Vaisnavas.

Con todo, vean por ustedes mismos cómo Sri Nityananda ahora es muy famoso por inundar los tres mundos con el tesoro del amor por Krishna.

Sri Nityananda es el devoto original del Señor Chaitanya. Su lengua es la morada de las glorias del Señor Chaitanya, pues pronuncia incesantemente los sublimes Pasatiempos de Sri Gaurachandra.

Uno puede obtener completa devoción a los pies de loto del Señor Chaitanya simplemente por adorar al Señor Nityananda.

Todas las glorias al Señor Nityananda, el original Señor y primera manifestación de Sri Chaitanya. Es solo por Su misericordia sin causa que los gloriosos Pasatiempos de Sri Chaitanya se manifiestan dentro de nuestro corazón.

Por la gracia de Sri Gaurachandra, uno puede desarrollar un apego amoroso por Sri Nityananda. Todos los obstáculos e infortunios en la vida son desarraigados tan pronto como es revelada dentro de nuestro corazón la verdad acerca de Sri Nityananda.

Aquellos que deseen sobreponerse al remolino material y sumergirse en el océano nectarino del servicio devocional, deben adorar a Sri Nitai Chandra.

Muchos alaban a mi Señor, diciendo: «El Señor Nityananda es como el Señor Balaram». Mientras que otros dicen: «Él es muy querido al Señor Chaitanya».

Escucho diversas opiniones acerca de Él, que es un sannyasi o un devoto humilde, o un erudito védico. Las personas pueden decir lo que gusten y conjeturar sin inhibirse, sin detenerse para nada. Algunos incluso llegan al punto de decir que Su relación con el Señor Chaitanya no es íntima, que Él es un sirviente de ínfima importancia.

Nada de esto me afecta para nada. Simplemente ruego que Sus pies de loto permanezcan eternamente impresos en mi corazón.

Si tras repetidos intentos por invocar a toda la gente a que utilice su buen juicio, un gran grupo de pecaminosos continúa criticando a Mi Señor, entonces Yo les doy una patada en la cabeza para salvarlos de una inminente y gran calamidad.

Aquellas personas que malinterpretan los comentarios dichos en broma por Advaita Acharya Prabhu a Sri Nityananda, y que los consideran como una crítica, deben comprender que esos comentarios son en realidad disfrazadas glorificaciones a mi Señor.

Todos los asociados Vaisnavas del Señor Chaitanya son almas liberadas e iluminadas. Aquello que a veces erróneamente es considerado como una molesta alegata o un lenguaje ofensivo usado entre ellos, en realidad no es otra cosa que una de las formas para expresar su profundo amor el uno por el otro y es parte de sus Pasatiempos.

Por lo tanto, se advierte a la persona ordinaria que no tome parte en esa fingida pelea, pues si ella critica a una de las partes, entonces llegará a verse en una situación muy precaria.

Aquel que sigue a Sri Nityananda sin criticarlo, se vuelve determinado en sus prácticas espirituales y ciertamente alcanza los pies de loto del Señor Chaitanya.

Intensamente anhelo el día cuando vea a mis Señores, Sri Nityananda Prabhu y Sri Chaitanya, rodeados de todos Sus devotos.

El Señor Nityananda es mi amo absoluto. Que por refugiarme en Sus pies de loto y en Sus instrucciones, se me permita servir y adorar al Señor Chaitanya.

Es mi muy grande deseo el estudiar el Srimad Bhagavatam en la presencia de Sri Nityananda-svarup, nacimiento tras nacimiento. Eternamente esta es mi humilde petición.

¡Todas las glorias al Señor Supremo, Sri Chaitanya! Tú eres completamente independiente para actuar como lo desees. Puedes otorgarme los pies de loto del Señor Nityananda, o puedes separarme de ellos. Por lo tanto, yo oro a Ti, mi querido Señor, Sri Chaitanya, para que misericordiosamente me otorgues el que todo mi corazón y alma permanezcan eternamente fijos en Tus pies de loto y en los pies de loto de Sri Nityananda.

Oh, Señor Chaitanya, Sri Nitai Chandra está dedicado exclusivamente a Ti, de modo que nadie puede alcanzar Su refugio sin Tus bendiciones.

De esa manera, Sri Nityananda anduvo por todo Vrindavan, esperando que Sri Gaurachandra manifestara abiertamente Sus Pasatiempos.

El peregrinaje de Sri Nityananda-svarup fue uno de Sus pasatiempos trascendentales y quienquiera que escuche estas narraciones con devoción se verá coronado con la gema más preciosa del éxito: Krishnaprema.

Sri Krishna Chaitanya y Sri Nityananda son mi corazón y alma. Este humilde sirviente, Vrindavan Das, ofrece este canto a Sus pies de loto.

Traducción al español

Sri Chaitanya Saraswati Sridhar Govinda Sevashram de México, A. R. (Jai Balai Das)

Capitulo Ocho

Sri Misra retorna al mundo espiritual

Capitulo Nueve

La niñez y los peregrinajes de Sri Nityananda

Capitulo Diez

El casamiento de Nimai y Laksmipriya

 

Comments

comments